Ser amigos no significa estar siempre de acuerdo en todo.

Oso y Ratón eran grandes amigos, vivían juntos en el bosque y no necesitaban nada más.

Hasta que un día, Ratón dijo: «Vámonos de viaje, Oso». Entonces todo cambió entre ellos.

Abecedario del cuerpo imaginado es una obra a la que le basta un total de 27 haikus y 459 sílabas para hablarle al lector de la lucidez y complejidad del cuerpo humano y de su encaje en el mundo como parte de la naturaleza.
La síntesis propia del haiku lleva a Mar Benegas, la escritora, a despojar su lenguaje dejando tan solo las palabras justas que se convierten en destello, en la promesa de algo importante. Recuperan la estrecha relación entre cuerpo y naturaleza las ilustraciones de Guridi, donde flores, hojas, briznas de hierba visten y trazan una delicada mirada al ser humano y a sus emociones.
El libro se presenta en encuadernación japonesa, incluye algunas reflexiones sobre la esencia del haiku y ofrece algunas indicaciones para su escritura. En la tercera edición, la autora ha escrito un epílogo donde habla de las experiencias que ha vivido a la hora de leer este libro tanto con niños como con adultos, animándolos a escribir sus propios haikus.

Un libro para jugar con las palabras, su forma y sonido, de la mano de un detective y su perro que te llevarán a recorrer un viaje en compañía de unas letras muy animadas... tanto que el tiempo pasará volando.

En Ratolí surt molt poc de casa, tan sols si està segur que farà bon temps, perquè el seu pelatge és massa blanc i bonic per poder-lo embrutar. Quan surt, porta la seva guitarra i canta una cançó. Cançó que, el dia que en Ratolí es perd, anirà repetint al llarg d'aquest llibre que es desenvolupa com una epopeia, perquè, en buscar el camí de casa, Ratolí arribarà a explorar el món sencer. Una història explicada amb esperit curiós, a través de versos i endevinalles; una història per pensar en el fet que, de vegades, per viure de debò cal abandonar la seguretat de la llar.

Ratón sale muy poco de casa, tan solo si está seguro de que hará buen tiempo, porque su pelaje es demasiado blanco y hermoso para poderlo ensuciar. Cuando sale, lleva su guitarra y canta una canción. Canción que, el día que Ratón se pierde, irá repitiendo a lo largo de este libro que se desarrolla como una epopeya, porque, al buscar el camino de casa, Ratón llegará a explorar el mundo entero. Una historia contada con espíritu curioso, a través de versos y adivinanzas; una historia para pensar en el hecho de que, a veces, para vivir hay que abandonar la seguridad del hogar.

“Los ojos que abre la infancia son dos ventanas. Por eso, ser la voz del poema es habitar la casa de la infancia. La casa de la infancia siempre debe estar habitada. Palabras que sanen y versos que canten. Porque en cada habitación se va forjando un recuerdo. Y se puede escuchar el trino de los pájaros. Y cada recuerdo sujeta las ramas de los árboles, hace volar las estaciones o enciende el sol y las estrellas.
Y los versos son lugares. Lugares que se construyen con palabras y que serán habitados, más tarde, por esos recuerdos”, así habla Mar Benegas de los poemas que ha escrito en este libro, ilustrados con imágenes libres y festivas por Francisca Yáñez.